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En el marco del Día Internacional del Ceramista, las y los creadores de siete piezas fueron reconocidos con el galardón

·                    La entrega corresponde al concurso llevado a cabo en 2021 y pospuesto por la COVID-19

El día de hoy, 31 de mayo, se realizó en la Pérgola de la tienda Fonart, en el Complejo Cultural Los Pinos, la ceremonia de entrega del 44 Premio Nacional de la Cerámica, correspondiente al año 2021 y pospuesta hasta ahora, cuando ya se han levantado las restricciones sanitarias derivadas por la COVID-19.

En esta edición se registraron 2 mil 260 piezas de 503 artistas y entre ellas, el jurado calificador eligió siete piezas, una por cada categoría, mismas que fueron reconocidas con un diploma y una medalla de plata:

Tzompantli, de Jerónimo Morquecho Bonilla (San Cristóbal de las Casas, Chiapas), en la categoría Cerámica contemporánea;  Tibor especial, de José Ismael Bernabe Rodríguez (Tonalá, Jalisco), en la categoría Alfarería vidriada sin plomo; Pato cabeza ancha, de Mónica Meneses Ramírez (Tlaxcala, Tlaxcala), en la categoría Cerámica Tradicional;  Caída libre, de  Brian Gregorio Corres Hernández (San Andrés Huayápam, Oaxaca), en la categoría Escultura en cerámica; Almas, de Cecilia Rocha Sevilla (Metepec, Estado de México) en la categoría Cerámica en miniatura; El nacimiento del Rey de reyes, de Guadalupe Armando Montoya Vázquez (Metepec, Estado de México) en la categoría Cerámica navideña y Tortuga mármol, de Nicolás Ortiz Ortega (Casas Grandes, Chihuahua)

En el evento se contó con la presencia de las y los representantes del Consejo de Premiación: en representación de la oficina de la presidencia del Gobierno de México, Diego Gámez; en representación de la secretaría de Cultura federal, Alejandra Frausto Guerrero, la subsecretaria de Desarrollo Cultural, Marina Núñez Bespalova; el director general de Culturas Populares, Indígenas y Urbanas (DGCPIU), Jesús Antonio Rodríguez Aguirre, Frino; en representación de la directora general del Fondo Nacional para el Fomento de las Artesanías (Fonart), Emma Yanes Rizo, la directora Comercial de Artesanías, Irene Gómez Saldaña; la directora general de Fomento Artesanal de Jalisco, Elisa Noemí Macedo Martínez, en representación del gobernador del estado de Jalisco, Enrique Alfaro, y el jefe de gabinete de la presidenta municipal de San Pedro Tlaquepaque, Mirna Citlali Amaya de Luna, Vicente García Magaña.

Se contó también con la presencia de la directora general del Premio Nacional de la Cerámica, Yunuén Estrada Martino; el director del Patronato Nacional de la Cerámica, Rodolfo Padilla, y la maestra Isadora Cuéllar en representación del jurado calificador.

Al hacer uso de la voz, la subsecretaria de Desarrollo Cultural, Marina Núñez Bespalova, afirmó que estos premios son el pretexto para que el público se acerque y conozca la variedad de técnicas, comunidades, pueblos, tradiciones y corazones que crean arte popular y, en función de eso, evitar el regateo. “Las manos hacen lo que el corazón y la cabeza dictan, por eso, cada pieza que sus manos forjan tiene un pensamiento y un sentimiento distinto, es arte. Es arte de artistas que han resistido durante muchos años la conservación de una tradición y eso no le pasa a cualquier otro artista. El arte popular es resistencia”.

En su oportunidad, el director general de Culturas Populares, Indígenas y Urbanas, Antonio Rodríguez Aguirre, Frino, afirmó que las técnicas con las que trabajan las y los artesanos se relacionan con la familia, la naturaleza y la misma sociedad. Las técnicas artesanales, dijo, “las reciben conforme van viendo a sus padres, a sus madres, a sus familias, y esa técnica que se va pasando de generación en generación no solamente consiste en el moldeado, el cocido, la iconografía, sino que implica también un sistema de valores en tanto que es la relación con la naturaleza misma. Ese enorme talento, de poder dar a la arcilla, a la tierra, al barro forma es una metáfora de lo que construimos también nosotros como sociedades y cómo recibimos de alguien esa habilidad y la transmitimos”.

A su vez, el jefe de gabinete de la presidenta municipal de San Pedro Tlaquepaque, Mirna Citlali Amaya de Luna, Vicente García Magaña, dijo: “Tlaquepaque es la casa de este premio y también es un pueblo alfarero en donde hay grandes representantes de la cerámica, pero, sobre todo, es la casa de todas las expresiones que nos dan identidad y nos permiten poner en alto el nombre de nuestra cultura. Para nosotros es una gran distinción ser la vitrina donde podemos conocer las culturas y las historias de quienes participan año con año. El premio también es para nosotros, el conocerlos, aprender de ustedes y que nos permitan entrar a su pasión y al amor que le tienen al oficio”.

Cabe recordar que el Premio Nacional de la Cerámica, fue creado en 1977 en San. Pedro Tlaquepaque, municipio especializado en la elaboración de alfarería tradicional. Desde entonces, su objetivo ha sido el fomento y la preservación de técnicas y diseños tradicionales de la alfarería mexicana. En sus inicios, el galardón contaba únicamente con dos categorías: “Barro tradicional” y “Cerámica contemporánea”, a lo largo del tiempo ha incrementado los reconocimientos hasta llegar a siete.

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